- Acepta que una sana autoestima nos permite estar satisfechos con lo que somos, tanto por fuera como por dentro, favoreciendo la creatividad y la independencia personal.
1. INICIO
COBRADOR DE COMBI.
Lo único que poseía era un viejo catre con algunas láminas de zinc recubierto de cajas de cartón, la ventana era, igualmente, cubierta con trozos de cartón. Aquella mañana el frío entraba hasta por los huesos. Allí en medio, Anthony reposaba después de su segundo intento de acabar con su vida.
Decía que nadie le quería, que nadie se interesaba por él, que su vida no valía la pena. Comía algunas veces a la semana.
A su padre no lo veía desde hacía meses. Presuntamente, su progenitor, iba todos los días a buscar trabajo, pero no se sabía nada de él. La pura verdad es que vivía emborrachándose con sus amigos en un barrio vecino. Pero, cuando se enteró que los compañeros de Anthony realizaban una colecta para comprarle medicinas, el vicioso de su padre, se anticipó a recibir el producto de la colecta a nombre de la familia, e inmediatamente fue a continuar bebiendo.
A su madre la veía pocas veces, ella salía de madrugada a vender verduras en un mercado cercano, regresaba pasada las diez de la noche.
En casa no había servicio eléctrico, escaseaba el agua debido al alto costo de este servicio, igual que la comida.
Después de las clases en el colegio, Anthony trabajaba como cobrador en un autobús; aquella noche con la paga que recibió compró doce pastillas anti histamínicas, pues, quería dormir para siempre. Llegando a casa tomó las doce pastillas.
Su madre que ignoraba todo, entraba a casa a eso de las diez de la noche y, escuchó los gritos de dolor de su hijo. Desesperada lo llevó al hospital donde le salvaron la vida con terribles lavados gástricos.
- ¿Qué te parece la vida de Anthony?
- ¿Cuál crees era su principal problema?
- ¿Por qué crees que buscó la solución a su problema en el suicidio?
- ¿Crees que Anthony estaría dispuesto a recibir asistencia de profesionales?
- ¿Hay algo que se puede rescatar de la vida de Anthony?
2. PROCESO
2.1 Textos Bíblicos
Éxodo 4, 10-12: 10 Entonces Moisés dijo al Señor: Por favor, Señor, nunca he sido hombre elocuente, ni ayer ni en tiempos pasados, ni aun después de que has hablado a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de lengua. 11 Y el Señor le dijo: ¿Quién ha hecho la boca del hombre? ¿O quién hace al hombre mudo o sordo, con vista o ciego? ¿No soy yo, el Señor? 12 Ahora pues, ve, y yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que has de hablar.
- ¿Por qué Moisés temía hablar en público?
Marcos 1, 21-22: 21 Entraron en Cafarnaúm; y enseguida, en el día de reposo entrando Jesús en la sinagoga comenzó a enseñar. 22 Y se admiraban de su enseñanza; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.
- ¿Qué dice este texto?
- ¿Por qué admiraban la enseñanza de Jesús?
2.2 Contenidos
Aceptarme a mi mismo
Sucede a veces que no estamos contentos con nuestra figura, con lo que hacemos o creemos que somos incapaces de hacer ciertas cosas por el miedo al que dirán, por ejemplo, cantar o hablar en público.
Eso es lo que sucedía con Moisés al inicio de su trabajo, como caudillo de la liberación del pueblo hebreo de las garras de la esclavitud a la que le tenía sometido el Faraón en Egipto. Moisés creía que no podía hablar en público, porque era “tardo en el habla y torpe de lengua” según su propio testimonio. Sin embargo, cuando comprendió que esa era su misión, superó su limitación y cumplió cabalmente con la misión que Dios le encomendó.
Cuando nos sucede lo de Moisés al inicio de su misión, es que tenemos una autoestima baja. Para superar esta situación, hay que examinarnos pacientemente y concienzudamente, aceptar lo que podemos hacer y lo que no podemos hacer.
Una persona es bella por lo que es interiormente no por la apariencia.
Actualmente hay el científico natural de Inglaterra, llamado Stephen Hawking, predijo con sus observaciones que el mundo está camino a la destrucción a causa del calentamiento global, a raíz de ello ya está ocurriendo que los glaciares se están derritiendo y en unas décadas más vamos a tener escasez de agua en el planeta.
Lo que muchos no saben, es que ese hombre desde hace unas décadas vive prácticamente sentado en una silla de ruedas diseñado por él mismo, porque sufre de una enfermedad degenerativa que le va quitando poco a poco varias funciones de su cuerpo.
Este hombre es un claro ejemplo de que la persona no vale por su apariencia sino por la inteligencia y la naturaleza le ha regalado.
Mucho antes, Jesús, fue el que dio ejemplo que tenía una autoestima adecuada, y los demás lo percibían, tanto es así que decían que enseñaba con autoridad y no como los escribas, basados únicamente en la palabra de otros, basados en la Ley. Jesús dijo en más de una oportunidad que no vino a suprimir la ley, sino a darla cumplimiento. Es decir, no solo enseñaba, sino que actuaba tal como enseñaba, una actitud como esa, le hacía ganar autoridad ante los que le escuchaban y le seguían por todas partes.
- ¿Eres capaz de aceptarte a ti mismo?
- ¿Con quién sueles compararte?
Competir con uno mismo
Hay personas que viven comparándose con otras personas, por ejemplo, las mujeres envidian el cuerpo de Claudia Schifer, de Naomy Campbell, de Talía, entre otras mujeres con cuerpo de modelo; hay hombres que viven comparándose con Brad Pitt, Ronaldinho, con Jefferson Farfán, entre otros famosos; en cualquiera de los casos, se angustian porque no se parecen a su ídolo, pero en ningún momento han tomado la decisión de hacer cosas para lo que realmente están dotados.
Cada una de esas personas admirables, no se han hecho de la noche a la mañana, ellos se han preparado, han luchado, entrenan cada día, se abstienen de cosas que no les ayuda a tener buen físico, todo un sistema de vida que les permite tener éxito en lo que hacen.
Jesús, un gran atleta de Dios, tenía una gran fuerza interior, no solo porque era Dios, sino porque era un hombre de oración, un hombre que reflexionaba, lo hacía por las noches y después, en el día, salía a enseñar, a curar y a perdonar los pecados de los hombres y mujeres.
De manera que si queremos lograr algo, que nos reconozcan, que nos saluden con respeto, tenemos que ganarlo con esfuerzo personal.
Al hacer eso estamos compitiendo con nosotros mismos y lograremos ser competentes haciendo lo que sabemos y podemos hacer.
- ¿Por qué hay veces que queremos ser exactamente como los demás en vez de perfeccionarnos nosotros mismos?
- ¿Quién te gustaría ser de aquí a 10 años?
